viernes, 26 de febrero de 2010

"El Hombre Mas Querido del Mundo"

Recibí la noticia en la universidad, la mama de mi hijo me dijo que a mi abuelo le había dado un paro cardiaco, me asusté y me imaginé lo peor, no podría vivir sin él.

El miércoles 23 de Julio, le llego un postre a mi abuelo de parte de una tía. El amaba el dulce, por eso apenas se lo dieron, no tuvo otra opción que devorárselo. Ese mismo día, le comienzan a dar cólicos, parecía que el postre le había caído mal. Llamaron a mi padrino para que fuera a verlo, y cuando llega, lo encuentra tirado en el piso, sin ninguna reacción. Mi padrino, tiene un problema en la rodilla, el usa bastón y hasta ahora no me explico como hizo para poder levantarlo, y llevarlo a tomar un taxi. Dio la vida por él.

Llegaron a la clínica San Felipe, 3 piso, lo llevaron de frente a Cuidados Intensivos. Para todo esto, yo me entero el jueves en la mañana, y todo fue muy milagroso. He llegado a la clínica a las 6 en punto de la tarde, las visitas a cuidados intensivos, solo están permitidas de 6 a 7, eso sí que fue un milagro. Encontré a mi primo Nicolás con el alma destrozada, todos queríamos mucho a mi abuelo, yo lo adoraba. Él era la persona más humilde del mundo, te contaba sus anécdotas más emocionantes, como cuando en futbol, Perú jugó las olimpiadas de Berlín en 1936 contra Austria. Ganamos por 4-2, por este motivo, Adolfo Hitler, ordenó que el partido se jugara de nuevo pero sin espectadores. Perú ya no quiso jugar, mucha trampa.

Entré a saludar a mi abuelo a la sala de cuidados intensivos, estaba sin polo, y conectado a muchos aparatos.

-¿Quién está ahí?

-¡Kuki! Soy yo Carlos

Mientras lo miraba se me partía el alma, yo la vi verde, no me controlé y me puse a llorar como un niño. Yo la cagué, supuestamente tenía que darle fuerzas, no desesperanzas. Él ya sabía que se iba a morir, ya había soportado un paro cardíaco antes, ya estaba sufriendo mucho.

-¡Arriba Alianza! –Le grité con toda mi alma, le di un beso, le dije Te Amo y me fui.

Salí desesperado, nadie me podía controlar. Mi papá me abrazo muy fuerte y no me quería soltar. Fuimos a preguntarle al doctor cómo está la situación de mi abuelo, el dijo “Está complicado”.

Lloré aún más, no lo podía aguantar. Mi abuelo, para mí era lo mejor del mundo, una persona sencilla y pícara. Nos quedamos hasta las 11 de la noche acompañando a mi abuelo, yo me quería quedar a dormir, pero la clínica no lo permite, solo está permitido uno, en este caso se quedo la enfermera.

Esa noche, recordé que era el aniversario de bodas de mis padres, cumplían quince años de matrimonio. Mi papá me explico que mi abuelo tenía que pasar dos días vivo, para que pudieran ponerle el catéter. El corazón ya no le bombeaba como debía ser, la sangre no llegaba bien a los órganos.

Los hermanos de mi papá, llamaban a cada rato para tener nuevas noticias, sus llamadas eran desde muy lejos. Tenían fe y esperanza con que todo iba a salir bien

Pase la noche con mi hermana mayor, rece como un loco, quería que mi abuelo comparta unos cuantos días más con todos. El viernes 25 de julio, sonó la alarma de mi celular a las 6 y 10 en punto, me levanté y grité ¡Bien Carajo! ¡Vamos Kuki! ¡Tú Puedes! Tanta era mi emoción, ya había pasado un día, solo faltaba otro más, pero para mí eran señales de vida, era un rayito de esperanza.

Yo era el único que estaba despierto, ya no pude volver a dormir. Lo único que hice fue ponerme a rezar y agradecerle a Dios por esta señal que me había regalado. No habían pasado ni 5 minutos, y empieza a sonar el teléfono de mi mamá ¡Concha su madre! Era esa noticia que cambió mi vida. Mi abuelo estaba muerto, se había asfixiado por un paro respiratorio.

No les voy a mentir, en ese momento quería estar solo, no quería saludar a nadie ¿con que ganas? En fin, ya todo estaba hecho. Fuimos a la casa de mi abuelo a dejar a mis hermanas, yo fui a la clínica con mi papa. Mi abuelo estaba blanco, frío, echado en la misma cama, ya lo estaban cambiando para el velorio. No pude, me estaba ahogando en mis propias lágrimas. Es imposible controlarse, no se puede, y eso que mi abuelo me enseño a aguantar el llanto. Lo abracé y grite con toda mi alma ¡Arriba Alianza Carajo! Era un momento muy emotivo, nadie lo podía entender. Yo lloraba desconsoladamente, nadie podía tranquilizarme y hasta ahora sigo con esos llantos.

Lo velaron en la sala de su casa, había un montón de gente, nunca había visto un velorio así. Realmente mi abuelo era bien querido, todos estábamos tristes. En pleno velorio, me puse a tocar y a cantar con mi garganta desgastada por todo el llanto sufrid, la canción que le canto a mi abuela en sus bodas de oro.

Cuando por primera vez soñé

Con los novios de los cuentos de hadas

Fue que por primera vez sentí

Que el amor también estaba en mi alma

Son motivos de nostalgia en mi

La quintita, el jardín y las flores

Son recuerdos de sueño de niña

De tiempos mejores

Que no volverán

Luego de tres días, así como Jesucristo, lo enterraron en Jardines de la Paz de Lurín, junto a la tumba de mi abuela, algo desesperadamente romántico. Realmente, ellos fueron ejemplos de todos, por eso cada vez que me voy a Ica, me persigno y le regalo una oración.

Mis tíos no llegaron a tiempo, lo encontraron muerto. No pudieron decirle adiós, yo si tuve esa suerte y agradezco al cielo, por haberme dado ese privilegio de haber conocido a la mejor persona del universo.

El entierro fue fatídico y muy emotivo con las palabras de mi tío Alberto, con el canto lloroso de mi papá y con esa camiseta blanquiazul que Nicolás alzó y puso sobre el ataúd del más bueno de todos.

La verdad, es que no quiero imaginarme como va hacer cuando me toque ver morir a mi papá

Me acuerdo muy bien, que luego de este jdrama, celebramos al estilo de mi abuelo, con música criolla a todo pulmón y todos unidos en familia. Por eso mi tío Alberto invito a todos los Carrasco una semana para cantar y gozar. Es por eso que esta historia tiene un final feliz.

Me alegro saber que está en el cielo con mi abuela, rezando por todos nosotros y por la unión de las familias. El prometió, que cuando se vaya al otro mundo, Alianza Lima iba salir campeón! Gran hombre de Garra y humildad, gran zambo de mi alma. Yo lo adoro aunque estemos muy lejos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Seguidores